Últimamente hemos estado en Cantabria y hemos visitados muchas playas lugares y poblaciones; muchas de ellas con encanto e historia, pero quiero destacar una pequeña cala, bueno lo de pequeña es un decir: Antes de nada avisar a todas aquellas personas que no disfrutan o ven mal un desnudo playero integral, este no es su sitio, si no te importa o disfrutas de él es un sitio a visitar.
En esta playa se ven desde la persona que luce el último modelito-de-cagate-pecio-de-verguenza hasta el que luce el cuerpo que le dio su madre y padre cuando nació (en algunos casos evolucionado un poquito), que no se ofendan los nudistas, bendita sensación de no sentirse mojado durante venticatorce horas.
Es la playa de Sonabia, entre Laredo y Castro Urdiales, en las proximidades de la población de Oriñón. Es una playa muy controlada por las mareas, al menos en verano, con una playa enorme en bajamar y muy reducida en altamar.Durante la bajamar se puede jugar a las palas sin molestar, hacer castillos, tumbarse al sol, etc, etc, etc.
Durante la pleamar o bajamar es un deleite par los aficionados al surf, pues se dan numerosas olas sobre las que cabalgar, si bien la estrechez de la entrada hace que se crucen fácilmente bañistas en el camino de los surfistas.
Uno de los atractivos de esta playa durante la bajamar son los numerosos charcos y lagunas que quedan en el intrincado carst que dejan las calizas y que hacen perderse a los más pequeños en el intento de perseguir al cangrejo o de cazar un pez con la red; la verdad es que si disponemos de una de esas cámaras que aguantan 5 0 10 metros de profundidad y tenemos un poco de calma podemos disfrutar del paseo y llevarnos con nosotros un magnifico recuerdo sin perseguir a ningún animal.
Desde el punto de vista del entorno en su margen izquierda se levanta un macizo calcáreo coronado por la cima del pico Candina, rodeado todo él de dolinas, hoyas como el nombre local designa a estas formas kársticas, En la cima de este complejo calcáreo, entre sus arco, cuevas y hoyas habitan una colonia de buitres, a los cuales se les puede ver durante todo el día rondar los aledaños en busca de comida; el ascenso se puede realizar desde varios lugares pero es algo costoso, subimos desde los 0 metros hasta los 489 metros del Candina.
Es de destacar también el conjunto de dunas que forman la trasera de la playa y que con un caracter claramente remontante asciende por la ladera del macizo rocoso.
Un lugar singular para visitar,
En esta playa se ven desde la persona que luce el último modelito-de-cagate-pecio-de-verguenza hasta el que luce el cuerpo que le dio su madre y padre cuando nació (en algunos casos evolucionado un poquito), que no se ofendan los nudistas, bendita sensación de no sentirse mojado durante venticatorce horas.
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| Playa de Sonabia - bajamar. |
Es la playa de Sonabia, entre Laredo y Castro Urdiales, en las proximidades de la población de Oriñón. Es una playa muy controlada por las mareas, al menos en verano, con una playa enorme en bajamar y muy reducida en altamar.Durante la bajamar se puede jugar a las palas sin molestar, hacer castillos, tumbarse al sol, etc, etc, etc.
Durante la pleamar o bajamar es un deleite par los aficionados al surf, pues se dan numerosas olas sobre las que cabalgar, si bien la estrechez de la entrada hace que se crucen fácilmente bañistas en el camino de los surfistas.
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| Playa de Sonabia - pleamar |
Uno de los atractivos de esta playa durante la bajamar son los numerosos charcos y lagunas que quedan en el intrincado carst que dejan las calizas y que hacen perderse a los más pequeños en el intento de perseguir al cangrejo o de cazar un pez con la red; la verdad es que si disponemos de una de esas cámaras que aguantan 5 0 10 metros de profundidad y tenemos un poco de calma podemos disfrutar del paseo y llevarnos con nosotros un magnifico recuerdo sin perseguir a ningún animal.
Desde el punto de vista del entorno en su margen izquierda se levanta un macizo calcáreo coronado por la cima del pico Candina, rodeado todo él de dolinas, hoyas como el nombre local designa a estas formas kársticas, En la cima de este complejo calcáreo, entre sus arco, cuevas y hoyas habitan una colonia de buitres, a los cuales se les puede ver durante todo el día rondar los aledaños en busca de comida; el ascenso se puede realizar desde varios lugares pero es algo costoso, subimos desde los 0 metros hasta los 489 metros del Candina.
Es de destacar también el conjunto de dunas que forman la trasera de la playa y que con un caracter claramente remontante asciende por la ladera del macizo rocoso.
Un lugar singular para visitar,
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